El Instituto de Estudios del Territorio presentó la estrategia de paisaje gallego en la jornada sobre paisajismo y medio rural

La estrategia elaborada por el actual Gobierno recoge las líneas maestras para el desarrollo de los instrumentos que se prevén la Ley del Paisaje de Galicia.

Santiago, 11 de enero de 2013.- El Instituto de Estudios del Territorio celebró en Guísamo un encuentro sobre paisajismo y medio rural. La finalidad de esta jornada de trabajo fue compartir y poner en común las experiencias de distintas iniciativas a favor de la defensa del paisaje gallego.

En esta jornada, organizada por el Centro de Formación y Experimentación Agroforestal (CFEA) de Guísamo con la colaboración de la Consellería de Medio Rural y del Mar y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, también participó la Escuela Gallega de Paisaje, el Laboratorio del Territorio de la Universidad de Santiago de Compostela, la Asociación Montes Vivos y el Instituto de Estudios del Territorio, en representación de la Xunta de Galicia.

El director del Departamento Técnico de Estudios del Instituto, Francisco Castillo, pronunció la intervención inaugural, que se centró en la presentación de las claves para actuar a favor del paisaje recogidas en la Estrategia Gallega del Paisaje.

Esta estrategia sobre el paisaje gallego recoge las líneas maestras para el desarrollo de los instrumentos que se prevén en la Ley del Paisaje de Galicia.

Las acciones que contempla la Estrategia se apoyan en tres ejes: los instrumentos para protección, ordenación y gestión; las estrategias de integración paisajística y las actividades encaminadas a la sensibilización, divulgación y formación.

La base para estas actuaciones es el Mapa de las Grandes Áreas Paisajísticas, que es el marco para la elaboración de los catálogos y directrices de cada una de estas áreas.

Las áreas de paisaje de Galicia se delimitan en función de la topografía, lo que ha permitido distinguir con claridad espacios diferenciados como sierras, planicies, valles y litoral; el clima, que ha hecho posible modular diferencias entre espacios topográficamente semejantes; y el uso del suelo, que ha facilitado una mayor diferenciación tanto en función del tipo del uso como del grado de ocupación.

Durante el encuentro se estableció un coloquio participativo entre los ponientes y el público asistente, un elemento fundamental (la participación ciudadana) para que las decisiones y actuaciones sobre el paisaje sean asumidas y aceptadas.